Cenas Maridadas

Cena Maridada en Taberna Laredo (XII): Nuevos Aires

El pasado miércoles 20 de Junio celebramos una nueva cena maridada en Taberna Laredo, de las que llevávamos tiempo sin hacer. En esta ocasión fuimos 7 comensales, y gran parte de nosotros íbamos a conocer el nuevo local (llevaban como diez días allí) en el que se emplaza Taberna Larero, ahora en la calle Doctor Castelo, cerca de la anterior ubicación.

El nuevo es local es bastante más amplio que el anterior, sobre todo la zona de barra, que está en la planta a nivel de calle. En el piso superior está el comedor en el que han instalado dos grandes armarios-bodega (uno para blancos y otro para tintos) con grandes cristaleras que dejan ver las botellas almacenadas allí. está decorado con lo que parecen cajas de vino tanto por el techo como por algunas de las paredes y la verdad es que está agradable. El único punto malo es el aire acondicionado, ya que cuando lo ponen sopla mucho y hace frío y cuando lo quitan hace calor. Miguel nos dijo que ya están solucionándolo, y que instalarán en breve unas nuevas rejillas que distribuyan mejor las salidas de aire. Donde han ganado mucho es en la cocina, ya que han pasado de la minúscula cocina que tenían en la calle Menorca a una ya de unas considerables dimensiones bajo el comedor.

Para empezar, Miguel nos abrió una botella de vino blanco, en esta ocasión un Chablis, Patrick Piuze Chablis Terroir de Fyé 2011, que estaba muy bueno y que nos tomamos antes y durante el primer plato de la noche, unos cuencos de Salmorejo que estaba delicioso, como siempre.

El segundo vino que tomamos fue ya un tinto, 12 Volts 2010, muy bueno, como todas las añadas que he probado de los dos vinos de esta bodega (4 Kilo Vinícola) de D.O. Mallorca. Para acompañar no tomamos dos Pasteles de Ventresca, Aguacate, Pimiento y Ali-oli, que está muy bueno (es ya casi un clásico). Para continuar nos puso una ración de Risotto de Sobrasada y Trufa, que estaba para chuparse los dedos (el gran fallo fue pedir una sola ración para todos...).

Para continuar Miguel nos trajo otro tinto, esta vez D.O. Manchuela, Buena Pinta 2011. Pese al nombre este vino lo calificamos todos de "peculiar" y no nos acabó de gustar del todo a ninguno. Con dicho caldo acompañamos los dos últimos platos, un Revuelto de Bacalao con Cigalas (que estaba buenísimo y del que pedimos una segunda ración que nos trajeron sin cigalas y no nos cobraron) y dos raciones de Jarrete Glaseado, que estaba espectacular, tierno, suave y muy sabroso.

Y como colofón, como no, los quesos. En esta ocasión fueron: Torta Pascualete de Trujillo (buenísimo), Lanzana, Reblochon, Afuega el Pitu y la estrella de la noche, el Pecorino Romano al Tartufo. Creo que nadie en la mesa lo había probado y nos encantó a todos. Eso sí, según nos dijo Miguel es el queso más caro que hay... ¡Si es que tenemos unos gustos tan caros! Para acompañar miguel nos sirvión una botella de Champagne, Tarlant Brut Tradition, que cumplió sobradamente.

Tras esto los habituales "copazos" (y un café para Marta): tres Gin-Tonic (dos de Citadelle y el tercero no recuerdo), dos Cuba-Libres de Zacapa Centenario y otro de Matusalem 15 años.

La cuenta final ascendió a 310€, es decir a unos 45€ por cabeza.

En esta ocasión pondré los datos de Taberna Laredo, ya que ha cambiado su ubicación:

Ficha:

Taberna Laredo

DirecciAln:  Doctor Castelo, 30

Localidad:  Madrid 

Distrito:  Retiro

Metro:  Ibiza

Teléfono:  915733061

Página Web: http://www.tabernalaredo.com/

Días de cierre:  Domingos 

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Cena Maridada en Taberna Laredo (XI)

El pasado miércoles 25 de Mayo volvimos a celebrar una cena maridada en Taberna Laredo. En esta ocasión fuimos 7 comensales, entre los cuales contamos con el regreso de Rafa tras un periplo que le mantuvo en el extranjero durante una buena temporada, lo que le impidió acudir a estas citas.

Para empezar, Miguel nos abrió una botella de vino blanco alemán, Dr. Bürklin-Wolf, Ruppertsberger Riesling 2009, que estaba bastante bueno. Para acompañar, dos raciones de Mejillones de Roca con salsa de Mojo Picón, seguidas de otras dos de Arroz con Carabineros (plato que habíamos probado en barra el viernes anterior José Antonio y yo, y que inmediatamente solicitamos para esta cena, ya quwe estaba impresionante.

El siguiente vino que tomamos fue un tinto, una Magnum de Sotorrondero 2009, D.O. Méntrida, de Bodegas Jiménez-Landi, que también nos gustó mucho. La comida con la que lo acompañamos fueron tres raciones de Tartar de Chicharro Limonero con Angulas, que también estuvo muy bien.

Y para rematar los quesos, que en esta ocasión fueron: Pont L’évêque (Normandía), Neuchatel Fermier, La Feuille de Chevre, Comté y Payyoy de Cádiz. Junto con los quesos nos bebimos una botella de Gran Vinya Son Caules Vinyes Velles 2005, D.O. Plà y Llevant (Mallorca), que también nos gustó bastante.

Tras esto los cafés (dos) y los consabidos "copazos": tres Gin-Tonic y tres Cuba Libres de Zacapa.

Hubo un "incidente" al llegar al doloroso momento de pagar. Nos trajeron una cuenta que a primera vista nos pareció muy barata. Tras hacer las comprobaciones pertinentes vimos que no nos estaban cobrando el vino, cosa de la que informamos a Miguel y que rectificaron de inmediato (si es que somos tan buenos que parecemos tontos...). Con todo esto, salimos a menos de 57€ por cabeza.

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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Cena Cumpleañera en Taberna Laredo

El pasado siete de dicembre José Antonio nos invitó a cenar para celebrar su cincuenta cumpleaños. La cena fue en esta ocasión en Taberna Laredo y asistimos un total de cinco personas.

Para empezar Miguel nos abrió una botella de champagne, Marie-Noelle Ledru Grand Cru Extra Brut (Ambonnay) para acompañar los primeros entrantes, que fueron uno Percebes (de los que me gustan a mi, como mi dedo pulgar...) que estaban excelentes y continuó con unas ¡¡Alcachofas con Jamón!! plato por el que fueron reprendidos ya que ni José Antonio ni yo comemos cosas como las alcachofas... Eso sí, el resto de comensales dijeron que estaban muy buenas.

A continuación nos sirvieron un Risotto de Liebre, Conejo, Garbanzos y Setas, que estaba muy bueno (y eso que no me gustan ni los citados roedores ni los garbanzos). Tras esto, nos pusieron unos Mejillones de Roca con Mojo Picón y para acompañar una botella de un tinto D.O. Priorato, Trío Infernal 1/3 2006.

Continuamos con un Tartar de Solomillo con el que nos abrieron otra botella de tinto (supliendo a la original que habían dejado en una mesa auxiliar y que se la sirvieron a la mesa de al lado), Viña de Andrés Romeo 2006 (eso sí, fue invitación de la casa). Dicha botella la acabamos con unas deliciosas Costillas de Waygu.

Para terminar, compartimos una fuente de Cerezas (chilenas obviamente, dada la época del año, que estaban muy sabrosas).

Como colofón, la ronda de "copazos" y cafés: un cortado, dos Citadelle con Fever Tree y dos Pacharanes (Baines).

Obviamente no pongo el precio ya que lo desconozco al ser una invitación.

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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Cena Maridada en Taberna Laredo (X)

El pasado miércoles 29 de Septiembre volvimos a celebrar una cena maridada en Taberna Laredo. pese a alguna baja de última hora finalmente fuimos 9 comensales (¡con 2 mujeres incluidas!).
Para empezar, Miguel nos sacó una botella de vino blanco francés, Vendanges 2009 Petit Chablis, Patrick Piuze, que estaba bueno. Para acompañar, dos raciones de Cecina de León con sus correspondientes platos de "Pá amb Tomaquet" y otras dos de Mejillones de Roca con salsa de Mojo Picón. AMbos entrantes muy ricos.
El siguiente vino fué otro blanco, un Riesling, Selbach-Oster, 2004 Zeltinger Sohlossberg Riesling Trocken, que también estuvo bien. La comida que lo acompañó fueron tres (tuvimos que pedir que nos trajesen más raciones de cada plato dada la cantidad de comensales y el buen saque de todos nosotros) raciones de Lasaña de Morcilla de Villada (Palencia).
A continuación nos abrió el primer tinto, un Borgoña, Morey Sant-Denis 2007 Philippe Charlopin Parizet, que no nos acabó de convencer del todo a ninguno, aunque hay que reconocer que los últimos tragos mejoraron bastante a los primeros, por lo que quizá sea aconsejable decantarlo. La comida que vino junto a este vino fueron tres raciones de Tartar de Atún (delicioso como siempre).
A continuación nos pusieron un poco de Cochinillo a bajatemperatura con Puré de patata trufado. Junto con el cochinillo degustamos un tinto de Toro, Termes 2008 (o como lo llamá Miguel "el Numathia para EE.UU."), que estaba realmente bien.
Para terminar los quesos, que en esta ocasión fueron: Conté, Brie, Vaca de Huesca, Formé a la Menta y Mini Pajerin di Capra. Todos ellos excelentes. Junto con los quesos nos abrió otro blanco, esta vez Alsaciano, Marcel Deiss, Gewurztraminer 2006, que estaba bueno pero no suficientemente frío. También nos sacó un poco de Cheddar al final.
Tras esto los cafés y los consabidos "copazos": cuatro Gin-Tonic (uno de Gin Mare, otro de Martin Miller’s, otro de Tanqueray 10 y el mío de Citadelle, todos con Fever tree), y 3 Cuba Libres de Elements 8.

En esta ocasión salimos a 67€ por cabeza.

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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Comida de San Isidro en Taberna Laredo

El pasado sábado día ocho de mayo celebramos lo que dimos en llamar "Comida de San Isidro", que estab prevista celebrarse el día de San Isidro, pero que hubo que adelanrse debido a compromisos previos de algunos asistentes iniciales que acabaron por no poder venir tampoco en esa fecha. Finamente fuimos seis comensales (tres de ellos debutantes en estos eventos).

Esta comida iba a estar basada en platos típicos madrileños, aunque finalmente el cocido se quedó fuera de la "convocatoria"... También hubo propuestas sobre la vestimenta, aunque el único que mantuvo la promesa de ir vestido de chulapo fue José Antonio.

El menú fue el siguiente:
Empezamos con un blanco de Borgoña (Puligny-Montrachet), Domaine Leflaive2008 Mâcon-Verzé, que estaba bastante bueno aunque no lo sirvió un poco más frío de lo deseable.
Queríamos comenzar con algún plato de pasta, pero no había ninguno ese día, así que empezamos con unos Mejillones de Roca en Salsa de Mojo Picón, que estaban realmente buenos. A continuación nos pusieron una Ensalada de Bogavante, que también nos gustó mucho.

Tras esto, nos abrió un vino de D.O. Madrid (como no podía ser menos), Peña Caballera, Garnacha 2008, bastante rico.
Junto con este vino nos trajeron unos Boletus a la Plancha, que estabn bien, aunque no demasiado sabrosos (cosa de la que informamos a Miguel).

Tras los entrantes, tocó el turno de los platos fuertes, consistentes en dos raciones de Rabo de Toro y otras dos de Callos a la Madrileña. Al parecer ambas cosas estaban muy buenas, especialmente los callos. Digo al parecer porque no me gustan ninguna d elas dos cosas y yo me pedí un Risotto de Boletus (que en este caso sí que estaba muy sabroso). Tras acabar el vino anterior Miguel nos abrió otro vino D.O. Madrid de la misma uva que el anterior (y del mismo pueblo, San Martín de Valdeiglesias), Navaherreros Garnacha 2007. También estaba bastante bueno.

Como a José Antonio y a Moisés les quedaba un poco de hambre, pidieron una de Carne Roja (los demás picamos un poco pero básicamente se la comieeron entre los dos).
Para este plato Miguel finalmente abrió un vino que había llevado José Antonio, Clos Rougeard, Appellation Saumur Champigny 2004. Este vino no nos gustó nada en nariz, ya que olía realmente mal, aunque en boca no estaba mal.
Para finalizar (y dado que le día anterior había sido el cumpleaños de mi pareja) esta vez hubo surtido de postres dulces, que nos trajeron con las velas encendidas y las luces apagadas. En concreto, estos postres fueron: Flan de Queso, Tejas, Bomba de Chocolate. Y para finalizar la comida madrileña unas Fresas de Aranjuez con Nata (excepto Isabel que se las tomó sin nata).

Para acompañar los postres nos abrió un champagne, Reflet D’Anton Bereche et Fils********, que no estaba mal pero que nos sirvieron en copas de tipo "flauta" en lugar de las correspondientes copas de vino donde se debe servir...

Y, tras los cafés, José Antonio, Isabel y yo nos tomamos el reglamentario Gin-Tonic de Citadelle con Fever Tree.

El precio esta vez no lo pondré, ya que dado que invitó mi pareja por su cumpleaños no me parece bien...

Menú de Pasta en "Taverna Laredinni"

El pasado Lunes 1 de Marzo celebramos otra de nuestras habituales cenas maridadas en Taberna Laredo, aunque en esta ocasión y debido al menú más bien podría haber sido en "Taverna Laredinni". Esto es así porque nos pusieron tres platos diferentes de pasta y acabamos rematando la faena con una selección de vinos italianos.

En esta ocasión fuimos 7 personas y el menú que nos preparó "Davide" fue el siguiente:

Comenzamos con unos Langostinos al ajillo con verduritas que estban realmente buenos junto con los que "Miquele" nos abrió una Magnum de Champagne André Clouet Grande Réserve Grand Cru Brut, que estaba realmente bueno, ya que dijo que el champagne marida muy bien con la pasta.
A continuación vino el primer plato de pasta, Linguini con sabor a mar (mejillones, almejas y algas), que estaban muy buenos, con un ligero toque picante.

El siguiente plato de pasta fueron los Papardelle con crema de Boletus, Champiñón y Beicon. Realmente bueno este plato, personalmente fue el que más me gustó. Durante el disfrute de este plato acabamos el champagne y, dado que en la mesa no había muchos aficionados al mismo, "sugerimos" a "Miquele" que cambiara de tipo de vino y nos abrió una botella de Les Sorts 2005 Vinyes Velles, D.O. Montsant (50% Mazuelo, 35% Garnacha y 15% Cabernet Sauvignon) que estaba realmente bueno, espectacular, nos gustó muchísimo a todos. Para rematar los platos de pasta, nos sirvieron unos Gnoqui con crema de Queso muy suaves y ricos.

Hasta aquí la pasta. Sólo destacar la ausencia de los añorados Ravioli de Erizos, que solamente he probado una vez (afortunado de mi, porque en la mesa la mayoría de la gente ni los ha probado) y que no nos puso ya que José Antonio y Marta los hab ían tomado el Viernes y el Sábado anterior.
Para rematar la inevitable tabla de quesos. En esta ocasión, como no, constaba de 3 quesos italianos: Queso con Uva Neviolo (espectacular, riquísimo, la marca era Beppino Ocelli), Queso Parmesano Viejo y un Queso tipo Piamonte.

Para acompañar (y para rematar la velada italina) "Miquele" nos abrió un Barolo, concretamente Barolo 2003 Azienda agricola, Edoardo Sobrino, que no nos gustó mucho a ninguno, la verdad aunque también es verdad que teníamos todavía el regusto del magnífico Les Sorts...
Para finalizar, además de los 5 cafés que se pidieron, los "copazos" de rigor, en concreto 2 Gin-Tonics de Citadelle y otro de Maguellan (todos con Fever Tree) y 2 Cubalibres de Matusalén 15 años.

Dado que la cena no fue muy larga, en esta ocasión nos dió para tomarnos otra ronda, aunque diferente de la anterior, ya que aunque yo seguí fiel a mi Citadelle con Fever Tree, José Manuel se pasó a la G’Vine Nouaison (con Fever Tree, claro) y 3 Cubalibres de Matusalén (José Antonio se pasó al Ron).

El total fue de 449,30€.

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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Cabritada 2.0 "Reloaded"

El pasado viernes día 22 de Enero tuvimos el segundo intento (y definitivo) por comernos ese cabrito al que nos iban a invitar en Taberna Laredo y del que por motivos ya sabidos (o churruscados) no pudimos disfrutar en la primera intentona...

En esta ocasión fuimos 10 comensales, y el menú fue como sigue:

Para comenzar, y junto con alguna cervecita de aperitivo, nos bebimos dos botellas de vino blanco Mitulo 2008 (vino que elaboran en taberna Laredo) para hacer tiempo mientras llegaban los dos últimos comensales (José Manuel y Marta) que llegaron tarde por motivos ajenos a su voluntad.

Mientras llegaban nos pusieron algo de picar con el único fin de no "perjudicarnos" en exceso con el vino. Disfrutamos de un par de raciones de un excelente Chorizo acompañado de "Pa amb tomaquet" ("pantumaca" que dicen algunos por estas tierras) a las que siguieron dos ensaladas de Ventresca con Tomate y Pimientos (muy buenas, como siempre).

Para abrir boca, abrimos (o mejor dicho nos bebimos, ya que las botellas que quedaron del primer cabrito frustrado ya estaban abiertas y oxigenándose) la botella de El Sequé 2006, D.O. Alicante (creo recordar que fue la que trajo Fernando), que estaba muy bueno. Acompañamos este gran vino con dos Revueltos de Morcilla que estaban muy ricos y suaves.

Pasamos a la siguiente botella, Rento 2003, D.O. Ribera de Duero (que creo que trajo Álvaro), que empezamos a degustar cuando llegó la estrella de la noche... ¡¡El Cabrito!! acompañado de un par de raciones de patatas, claro. Del cabrito sólo decir que estaba símplemente espectacular, riquísimo, delicisoso...

Como el cabrito duró un poquito (Miguel, que es un hombre de poca fe decía que si sobraba nos lo podíamos llevar en un "tupper") tuvimos que ir bebiendo el resto de botellas que habíamos llevado. Continuamos una botella que trajo Jiosé Antonio para completar la "convocatoria" ya que se quedó diezmada despues de las que nos bebimos en su día, Torroja de Terroir al Limit 2007, D.O.Priorato y finalizamos el cabrito con la botella de Valbuena 2003, D.O. Ribera del Duero que habíamos llevado Marta y yo.

Ni que decir tiene que nos acabamos todo el cabrito "in situ" como no podía ser de otra forma, habiendo grandes comedores (y comedoras) en la mesa como los que estábamos allí reunidos.

Para terminar la clásica tabla de quesos, esta vez formada por: Gruyere, queso con Trufa (muy rico), Cabra de Castellón, Brie con Mostaza (espectacular, para mi el mejor de todos) y un Queso Azul Italiano que todos dijeron que estaba muy bueno (yo sólo lo probé un poquito ya que no me gustan los quesos "podridos").

Para acompañar los quesos Miguel tuvo a bien invitarnos a una botella de un Pedro Ximénez de más de cien años, Ermita de Santa Águeda* que estaba espectacular y acompañó los queso a la perfección.

Una ronda de cafés, y los consabidos "copazos" para rematar, en los q ue se produjo una de las anécdotas de la jornada, "bronca" de Miguel a Álvaro por pedir un Ron Edmundo Dantés con Coca-cola (hasta ahí bien) ¡y un chorrito de zumo de limón!. Además de esta copa nos tomamos tre Gin-Tonic de Citadelle y uno de Bulldog (todos con Fever Tree por supuesto) y un Jonnhy Walker con Coca-cola.

Por cierto, que vino David (el cocinero y hermano de Miguel) a saluidar y tras quejarnos de que no habíamos tomado los Ravioli de Erizos que habíamos pactado la otra vez, además nos dijo que tenía erizos frescos... ¡que pena, con lo buenos que están! En fin, otra vez será.

Para terminar quiero agradecer desde aquí (aunque ya lo hice en persona tras la cena) a Miguel y David por invitarnos a esta gran cena donde lo pasamos de maravilla (como siempre en Taberna Laredo, por otra parte).

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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Cena Maridada en Taberna Laredo IX (... o "El Cabrito se quemó")

Hace ya algún tiempo (a finales de Noviembre pasado, pero a causa de un fuerte ataque de vagancia no lo he publicado hasta ahora) teníamos fijada (desde la última cena maridada, reflejada en este blog) en Taberna Laredo una "corderada" (en realidad un "cabritada" porque era cabrito lo que íbamos a comer, pero queda peor...) a la que nos iban a invitar y en la que nosotros habíamos quedado en llevar el vino para acompañar las viandas. Así que mi pareja y yo nos presentamos a las nueve y media con una botella de Valbuena 2003 en ristre y como éramos los primeros en llegar nos dirigimos a la atestada (como siempre) barra a tomar un vino. Al llegar a un hueco que vimos al fondo, vi a Miguel que me estaba llamando. Fui a hablar con él y ya vi que ponía cara rara. Al llegar me dice: "No te vas a creer lo que a pasado... se nos ha quemado el cabrito". Yo pensé que me estaba vacilando y así se lo dije así que fuimos para la cocina y me enseñaron un trozo de costillar quemado que sacaron de la basura. Al parecer lo habían puesto a hacer a mediodía y se habían dejado el horno encendido al irse...  Según iba llegando el resto de comensales (éramos ocho personas - ¡3 mujeres! -,  los cinco "machos" con las botellas de vino pertinentes) fuimos informándoles del "desastre" y de que tendríamos que hacer una cena maridada normal (o un "clásico" como lo llamó Miguel).

Bueno, el menú fue el siguiente:

Primero Miguel nos invitó a una botella de blanco como desagravio, y no una botella cualquiera, una magnum de blanco de Borgoña, en concreto Poilly-Fussé Villes Vignes Auvigue, Burrier, Revel, que estaba muy bueno.

Para empezar la comida nos puso una Ensalada de Tomate, Cebolla, Ventresca y Pimiento. Muy rica.

A continuación el fabuloso (como siempre) Tartar de Atún. Durante la degustación del tartar empezamos a abrir algunas de las botellas que habíamos llevado. En concreto abrimos el AN/2 2006  (2 botellas) que había llevado Juan. Este vino está realmente bien, nos gustó a todos.

La comida continuó con una ración de Alubias con Manitas, Morros y Setas silvestres que nos fuimos pasando y que estaban muy buenas.

A continuación una Lasaña de Boletus, Perrechicos y Setas de Cardo que estaba fantástica y para acabar un Entrecotte y un ración de Cochinillo.

Con la carne abrimos el vino que llevó José Antonio, un Pesquera Reserva 2003, un clásico que estaba muy bueno también.

Para finalizar la inexcusable tabla de quesos (Idiazábal, Piamonte y dos quesos Suizos) acompañada de una botella (de medio litro) de Rioja blanco dulce, Graciela 2003. Este vino nos decepcionó un poco, porque era excesivamente suave.

Y como colofón unos cafés para quien quiso y los copazos de rigor. Como sólo había Citadelle para una copa (la primera que se tomó Juan) fua casi una degustación de ginebras. Yo primero tomé un Gin-Tonic de Bulldog, que me gustó bastante y después de Millers (la Bulldog se acabó también) que me gustó algo menos, mientras que José Antonio empezón con un Gin-Tonic de Pink y acabó con la Millers como yo. Álvaro se tomó dos copas de Ron Edmundo Dantés con Coca-Cola.

Pues eso, que este próximo viernes tenemos la segunda oportunidad. Esperemos que no se vuelva a quemar el cabrito...

Para terminar, como siempre, pondré un enlace a la entrada en la que están los datos del restaurante (por si a alguien le interesa):

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